Somos personas, no inmigrantes ilegales

 

Por desgracia cada vez abunda más los intolerantes. Para muchos el ser pobre es un delincuente. Nacer pobre es sinónimo de ladrón. Los pobres no nacen como tales. Es una herencia que te dejan cuando naces. Que tu no pides y que te obligan a tomarla. Y dejas de ser un ser humano, para ser escoria. No tienes derechos, pues no tienes dinero.

Si a esto le sumamos, el nacer en un país, del mal llamado tercer mundo. Entonces ya pasas a ser, un despojo, que deben de tener algunos lejos de sus vidas. Pero eso les pasa, por no saber cómo funciona los derechos fundamentales. Si, por ejemplo, yo elegí nacer en España. Antes de nacer evaluaron mis genes y aprobé la selectividad de elegir. Incluso por mis buenas calificaciones, pude elegir donde nacerían mis padres. Pero suspendí, para elegir la herencia. Bueno, tuve algo de suerte. Y esos que nacen en países pobres, que eligieron ser ladrones, parias de la sociedad. Ellos tienen la culpa de su miseria. Que tontos, mira que no elegir un país rico. Así que deben de pagar las consecuencias de su nacimiento. Deben sufrir el insulto, la intolerancia y la estupidez de esas llamadas “personas” que solo tuvieron la suerte de nacer en un país rico. Pareciendo que su suerte, se debe a su inteligencia. Las agresiones a pobres, extranjeros, cada vez están más abundantes. Y veo que les echa la culpa a los propios agredidos. ¿Cómo se les ocurre salir de su país? Y venir al mio, donde todos son dueños de nuestro suelo. Como se les ocurre buscar un futuro, para sus hijos. En mi país! MI PAIS!!! Que es mío, de mi familia y mis vecinos. Que solo para los que vengan con dinero. Donde algunos, hablan en nombre de todos. A ellos deberíamos mandarlos algún país de esos, donde todos huyen. Y que se hagan dueños de ese país.

Cuando veo las cosas que dicen, que hacen, lo único que me queda es la vergüenza ajena. Vergüenza de esos mal llamados compatriotas, que ni son patriotas, ni tan siquiera son llamados. No somos los dueños de un suelo por nacer en el. Pues no elegimos donde nacemos, ni sabemos dónde vamos a morir. Lo único que sabemos seguro, es saber dónde hemos nacido. Vergüenza de esos llamados católicos, cristianos, personas de fe. Deberían de mirar Eclesiastés 11. “Dale de comer al hambriento, y un día serás recompensado. Comparte lo que tienes con siete y hasta ocho amigos, pues no sabes si mañana el país estará en problemas”. Que un agnóstico les tenga que recordar esto, se les debería de caer la cara de vergüenza.

 

¿En nombre de quien se proclamó el Rey? En nombre de quien, tiene más derechos que el resto de los mortales. ¿Porque el pobre debe ser una lacra y el rico un protegido? ¿Que dicta esos derechos, tan estúpidos?

Menos mal que Jesús, no nació en España. Sería otra lacra de la sociedad y tendrían que deportarlo. España no es el suelo, España son los españoles. Y no hay que tener un buen país. Hay que tener buena gente. Ya nos olvidamos, cuando convivían musulmanes, judíos y cristianos.

Un inmigrante ilegal. Es una persona que busca un bienestar. Un futuro  para sus hijos. Nadie se va de su hogar, por gusto. Tengo el gusto de ser, un inmigrante legal. Y estar en un país, de los que algunos llaman pobre. Pero su hospitalidad, a sido de un país grande de corazón y humilde. 

Tendremos que aprender de los humildes.