Si hay algo personal e intimo, son los sentimientos. Es
algo de que todos opinan, y nadie sabe. Cada sentimiento es diferente. Cada
momento es personal. Todos tienen un consejo, pues pensamos que hemos vivido
situaciones similares. Si, eso es verdad, pero los corazones son diferentes.
Muchos libros son parecidos, tienen tapas parecidas, pero lo esencial es
diferente. Todos tenemos un mundo interior, que solo conocemos nosotros.
Yo soy un libro abierto, pero con las fantasias de un
perdedor, de sentimientos absurdos. Mis propias fantasías, que creo a mi
alrededor. Un ególatra humilde. Que solo oye palabras de halago, en una
hipocresía de malicia. Sin escuchar las verdades, de quien mal te quiere.
Soñando un futuro, que solo existe en libros, no escritos.
Podrán estimular mi ego de cartón. Mis sueños de neón. Pero
nadie podrá quitarme, mis momentos de pasión. Hay que romper con todo, para
vivir el momento. Podran quitarme mi dignidad, mi corazón, mis sentimientos
puros. Pero no podrán quítame mis noches de felicidad. Que se dieron de una
falsa verdad.
Que sabe nadie de la vida, si todas son diferentes. Y los
perjuicios de cada uno, son la indiferencia de los demás.
Muchas personas no entenderán, lo que escribo. Ni lo
pretendo. Pues son mis sentimientos y carecen de razón. Para poder entenderlos,
tendrían que estar dentro de mí. Y por suerte o por desgracia, nadie puede
verlos. Porque si pudieran, me comprenderían. Y si comprenden no entienden.
El acuerdo era
que fuéramos sinceros.
El acuerdo era
olvidarnos de nuestros infiernos
El acuerdo era
intentar ser felices
El acuerdo era
nuestras almas, fueran una sola
El acuerdo era estar juntos, empezando de cero
El acuerdo era
compartir nuestros momentos infelices
El acuerdo era
estar juntos, sin condiciones
El acuerdo era
ser uno solo, con emociones
El acuerdo era
conocernos, sin mentir
El acuerdo era estar juntos, conociéndonos
ser cada uno. Para ser uno solo y sentir las pasiones
El acuerdo era
conocer la vida, sin pensar el pasado
El acuerdo era
pintar un futuro, sin lienzo, sin pinturas
El acuerdo era
ser uno más uno, sin restar, sin ocultar
El acuerdo era
crear nuestro mundo, nuestro hogar
El acuerdo era
ser nosotros, sin nadas mas
Que nuestra vida
fuera, solo nuestra
El acuerdo era
querernos y mirarnos a los ojos
Sin mentiras, sin
reproche
y dormir juntos
cada noche.
El acuerdo era
nuestro viaje al futuro
Pensando en un
amor puro.
El acuerdo éramos
nosotros como uno solo.
Y que cada mañana
tuviéramos nuestras emociones
Y lo siento, yo
soy yo, sin futuro
Sin emociones,
que robaron
Las traiciones.
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